Construcción emerge como el único sector que inicia el año sumido en el pesimismo

Nadie en el mundo de los negocios espera que este año sea igual de negro que 2020, pero en paralelo tampoco pareciera haber certeza de que tan bueno podría ser el que se inicia. De hecho, el Índice de Confianza Empresarial (ICE) que elabora cada mes el Centro de Estudios en Economía y Negocios (CEEN) de la U. del Desarrollo (UDD) retrocedió en enero a un nivel "neutral" -es decir, ni bueno ni malo-, dejando atrás el leve optimismo con que cerró diciembre.

De menor cuantía, también se verificó un descenso de un peldaño en el segmento agrícola hasta un nivel "levemente optimista", el que respondió a una visión más negativa sobre la marcha del negocio y del mismo sector en el corto plazo, así como un retroceso en las perspectivas de resultados recientes.

Lo anterior, pesar de percibir mejores precios de venta en los últimos meses, incluso considerando el menor tipo de cambio.

En minería e industria el ICE también retrocedió un escalón afectados por un deterioro del escenario que se anticipa en el corto plazo, incluida la economía en general. El primero dejó un escenario positivo para situarse en una condición "neutral"; y el segundo vio atenuarse su mirada favorable lo sobre que se viene a futuro.

El comercio, a su vez, volvió a ratificar la condición de leve optimismo en que se instaló desde octubre del ejercicio pasado.

La única excepción en enero fue el sector financiero, cuya confianza transitó desde "muy pesimista" hasta "neutral" (+41 puntos). En este auspicioso desempeño destacó una mejora en las percepciones sobre la situación de negocio reciente, así como de la situación de la economía y del sector a tres meses.

En este contexto, la visión de los empresarios sobre la situación del negocio en los últimos meses, relativa a la que habían esperado, continuó mostrando la tendencia positiva iniciada en la segunda mitad del año pasado, un período donde la pandemia llevó a la economía a su mayor recesión desde la crisis que golpeó al país al partir la década de los '80. Así, se asume que 2020 terminó con una caída del Producto Interno Bruto (PIB) del orden de 6%.

En materia de áreas temáticas, la medición del CEEN-UDD dio cuenta de un deterioro en las perspectivas relacionadas con la contratación de trabajadores, las que evoluciaron desde un nivel "neutral" hasta uno "levemente pesimista" (-12 puntos), contrarrestando el avance registrado en diciembre. Esto se dio principalmente en los ámbitos financiero, del campo y construcción.

También hubo una visión menos favorable sobre la demanda nacional, precio de los insumos y nivel de inventarios.